Los Alfa hidroxi ácidos (AHA) y Beta hidroxi ácidos (BHA) son términos correctos de química orgánica. Ambas moléculas contienen un grupo de alcohol (o hidroxilo) y un grupo de ácido carboxílico. El prefijo “alfa” y “beta” indica qué tan separado esta un grupo del otro. Una molécula de carbono separa a los grupos alfa, y dos a los beta. Algunos AHAs contienen una porción de BHA también, como el ácido cítrico y el mandélico. Se les considera AHAs porque actúan más de aquella manera. El beta hidroxi ácido más popular, y prácticamente el único utilizado en productos cosméticos es el ácido salicílico.
La diferencia principal entre AHAs y BHAs es que los primeros son solubles en agua, mientras los segundos son solubles en aceites. Ambos exfoliantes químicos tienen la capacidad de penetrar más profundo en la piel y soltar más células de piel muerta que los exfoliantes físicos como cepillos limpiadores o cáscaras de café. Así, los AHAs y BHAs pueden mejorar la apariencia de piel con hiperpigmentación, incrementar luminosidad, reducir la apariencia de arrugas y mejorar la textura de la piel.
Los AHAs actúan quitando el “pegamento” que une a las células muertas. Así, la piel muerta se cae con facilidad mostrando debajo piel más joven y radiante. Además, los AHAs incrementan el grosor de la piel e incrementan la producción de colágeno y la calidad de las fibras elásticas en la piel. Los tres AHAs más comunes son el ácido glicólico, láctico y mandélico.
El ácido glicólico tienen el tamaño de molécula más pequeño, lo cual lo convierte en el AHAs que más penetra la piel, pero con más potencial de irritación. El ácido láctico, con un tamaño de molécula más grande, es recomendado para pieles sensibles y tiene propiedades humectantes. El ácido mandélico es un AHA menos común que los primeros tres. Es derivado de las almendras y naturalmente anti-bacterial. Por su grande tamaño molecular tarda más en hacer efecto, pero en menos irritante que los pasados dos AHAs, lo cual lo hace excelente para personas con acné.
Los BHAs tienen la capacidad de entrar a los poros y “destaparlos” por su solubilidad en aceite, pueden secar la piel, y no incrementan la fotosensibilidad. Son perfectos para pieles acnéicas y con puntos negros. El ácido salicílico no es apto para aquellos sensibles a la aspirina.
En la rutina de belleza, el exfoliante químico se coloca después de la limpieza, y antes del suero tres veces por semana. El exfoliante químico también puede ser encontrado en formulaciones de limpiadores (que pueden ser utilizadas todos los días) o mascarillas y peels(son mejores dejarlas para una vez por semana). Es indispensable la utilización de bloqueador solar durante el día para evitar irritación por el sol. Los AHAs y BHAs pueden ser utilizados al mismo tiempo teniendo cuidado de monitorear reacciones al producto individual antes de combinar. Algunos efectos secundarios de los AHAs y BHAs son la irritación, sensación de quemazón y sensibilidad a la luz.