La vitamina C es un antioxidante que ayuda a secuestrar los radicales libres de la piel, minimizando daño por la contaminación y arrugas prematuras. También incrementan la producción de colágeno natural, aclara manchas de la piel, es un efectivo tratamiento contra el acné, ayuda con el enrojecimiento, empareja el tono de la piel y a tratar las líneas de expresión Existen varios tipos de vitamina C, todos con sus pros y contras. A continuación discutiremos los más populares:
El Ácido L-Ascórbico es la forma más efectiva de Vitamina C en cuanto a producción de colágeno y protección UV. Puedes encontrarlo en concentraciones de hasta el 20% en un producto. El ingrediente es bastante inestable y se descompone cuando se expone al calor, luz y aire, lo cual quiere decir que cuando compres un producto con éste ingrediente es probable que ya no esté en el pico de su eficiencia.
Al buscar productos con vitamina C se recomienda comprar aquellos en envase airless y opacos, almacenar el producto en un lugar fresco y oscuro, utilizar formulas libres de agua y buscar formulas que incluyan acido ferúlico y vitamina E. Cuando usas un suero de ácido l-ascórbico lo mejor es usarlos por la mañana y esperar 10-20 minutos después de su aplicación antes de aplicar otros productos para mejorar su absorción.
Como el ácido ascórbico es inestable en formulaciones basadas en agua lo puedes encontrar también en presentaciones donde polvo esta suspendido en vehículos de siliconas (como la de The Ordinary). El problema con estos productos es que la vitamina C queda atrapado en la solución y solo un porcentaje bajo va a verdaderamente hacer contacto con tu piel (en un suero 20% Vitamina C de este tipo, aproximadamente solo el 2% va a ser utilizado por la piel).
En general, el ácido L-ascórbico es la mejor opción cuando buscas un producto de vitamina C. Si encuentras que este ingrediente te irrita la piel o exacerba el acné, tal vez sea así por el pH bajo de la formulación (aproximadamente 3.5) por lo que te recomiendo buscar la vitamina con origen de otro ingrediente.
El Ascorbil Fosfato de Magnesio (MAP) es una buena opción para pieles sensibles y una forma bastante estable de la vitamina C. Puedes encontrar este ingrediente en concentraciones del 5-10%, en las cuales solo el 2.3% tendrá contacto verdadero con tu piel. El MAP tiene que convertirse en ácido L-ascórbico cuando se aplica en la piel, haciéndolo menos efectivo que el L-AA puro. Estudios han demostrado que el MAP tiene mayor poder de penetración en capas inferiores de la piel que el L-AA. Además, el ingrediente no depende de un pH ni requiere los 10-20 minutos de espera que el ácido ascórbico requiere. Esto lo hace el mejor ingrediente para gente con pieles sensibles y horarios ocupados.
El Ascorbil Fosfato de Sodio (SAP) es una mejor opción para las pieles sensibles porque funciona mejor en un pH neutral. También ha demostrado ser un efectivo tratamiento del acné. El SAP también necesita ser convertido a ácido L-ascórbico al aplicarse, y lo vas a encontrar en concentraciones muy bajas. En general el ingrediente es menos efectivo que el L-AA y el MAP, pero se recomienda para ciertos tipos de piel.
El Ascorbil Palmitato y Ascorbil Tetra-tetraisopalmitoyl (AP y ATIP) son derivados de la vitamina C que son solubles en aceite. Esto quiere decir que tienen un poder inferior de penetración que los ingredientes mencionados anteriormente. El AP y ATIP necesitan un pH de 5 para ser estables, tiene más problemas de estabilidad que el MAP Y SAP, y se encuentra en formulaciones de el 3% o menos. Además, los estudios demuestran que no es tan buen ingrediente para incrementar la producción de colágeno. Si buscas un suero con algo de estos ingredientes te recomiendo que compres una solución basada en aceite en lugar de una crema o emulsión para obtener la mayor penetración posible….o que mejor busques otro ingrediente proveedor de vitamina C.
Recuerda: Si vas a introducir productos nuevos a tu rutina de belleza recuerda hacerlo con por lo menos 2 semanas entre ellos. Si tu suero está amarillo, café, naranja o de cualquier otro color que no es el propio probablemente ya esta desestabilizado. También es importante revisar su aroma. Los olores rancios, ácidos, o extraños en general son un indicador de caducidad.